“LA CONSECUENCIA DE GANAR ES TRABAJAR”

Por Hugo Videla
soydeleste2013@gmail.com
Fotos: Jorge Ruiz

VÓLEY: FMV - MASCULINO A1/A2 - TORNEO CLAUSURA 2019

Así se refirió Marcelo Alín, director técnico del Centro Social Agustín Álvarez Rivadavia Vóley, al gran momento que vive la institución Naranja, llegando a las finales de A1 y A2 al mismo tiempo en la primera división de la rama masculino. Sin dudas, y pase lo que pase en las finales, 2019 ha sido uno de los años más importantes de la historia del vóley en Rivadavia.  

SOY DEL ESTE dialogó con Alín, tras la clasificación Naranja a la gran final de la A1, luego de vencer en tres sets corridos a Municipalidad de Luján “B“ en el tercer y definitivo juego de una serie atípica (ver aparte). La palabra de uno de los referentes del vóley en el Este, para muchos, el mejor entrenador mendocino de la actualidad.

-¿Cómo se puede describir este momento de Rivadavia, siendo finalista de la A1 y A2 al mismo tiempo?

-La consecuencia de ganar es trabajar. Primero trabajamos y después buscamos resultados. Lo más difícil es crear la cultura del entrenamiento. Detrás hay otro trabajo que quizás no se ve, que es el de Viviana Soriano, que es una coach personal que nos ha ayudado en la parte emocional, y hemos mejorado y aprendido mucho tras la visita de Jorge Ferreyra, el preparador físico de Boca.

Además, hay mucha gente que trabaja sin recibir ningún beneficio. Familiares, amigos, dirigentes. También el municipio que este año nos dio un apoyo fundamental, son todos detalles que aunque no se vean, a la larga nos ayuda a ganar partidos.

-El aspecto físico ha sido fundamental para llegar a estas instancias…

-Sí, hemos jugado los dos torneos con el mismo plantel, y hemos llegado a la final en ambos, casi sin problemas de lesiones, salvo Máximo Pasut que tuvo una molestia en un torneo que fue invitado por Luján. El rival a vencer ahora es Regatas, que a comparación nuestra, tiene dos equipos distintos. Creo que esto es aún más meritorio, porque hemos llegado de buena manera, manejando las cargas para poder ser competitivos.

-¿Cómo se encaró el tercer juego ante Luján, tras todas las incidencias que existieron en los juegos anteriores, entre ellas el casamiento de Diego Álvarez y finalmente las bengalas?

 -Es cierto que la ausencia de Diego en el primer juego fue importante. Tuvimos que improvisar con otro armador y perdimos. Pero es algo respetable y que puede pasar. Lo de las bengalas fue algo atípico. No se pueden encender en ninguna cancha. Desde mi punto de vista, cualquier federación hubiera descalificado automáticamente al equipo. Pero nosotros queríamos jugar el tercero y creo que no dejamos dudas. El partido fue 3-0 y demostramos que somos mejores.

-¿Pero entendés el enojo de los jugadores de Luján, quienes por algunos inadaptados se quedaron afuera de la final?

-Sí, se puede entender el enojo, pero nosotros no provocamos absolutamente nada. Fuimos a jugar un partido, que lo íbamos perdiendo legítimamente, y ellos (los hinchas de Luján) tiraron dos bengalas que nos afectaron a tres jugadores. Nosotros no hicimos nada. Y después en el tercero lo ganamos en la cancha, no lo ganamos en el escritorio. Creo que no quedaron dudas en este último partido de que éramos superiores.

-¿Cuál es tu opinión sobre este final de año, donde todavía no se definen los campeones?

-Esta maratón de partidos en el cierre de año nos ha perjudicado, estamos agotados. Nos gustaría que la Federación Mendocina de Vóley pare y que continuemos en marzo. Se hizo en el invierno, hubo un parate por las vacaciones y después continuó sin problemas, ¿por qué no hacerlo ahora también?

-Pase lo que pase en las finales, ¿son conscientes de que ha sido un año histórico para el vóley de Rivadavia?

-Sí, claro. Ha sido un año fantástico para el vóley de Rivadavia en todas sus categorías. Hemos puesto a la institución en la cima del vóley mendocino, dejando una vara muy alta para los próximos años.  

Resta conocer días y horarios de las finales entre Rivadavia y Regatas. Todo indica que serán finales a un solo partido, tanto en A1 y A2, para poder cerrar el año con los campeones ya definidos. Si Rivadavia sale campeón de la A2, también se coronará campeón anual, de lo contrario, deberá jugar otra final, para ver quién es el mejor equipo del 2019. Al revés es la situación en la A1, donde si los Naranjas logran el título, clasificarán a jugar la final anual de la máxima categoría.