UN "CLÁSICO" DEL FÚTBOL QUE NO QUEREMOS

Por Mario Aguirre
soydeleste2013@gmail.com

FÚTBOL: LIGA RIVADAVIENSE

La violencia ganó una vez más en una cancha de fútbol y esta vez dejó sin decisión al superclásico más importante de la historia entre la rivalidad deportiva de California del Este y La Dormida. El partido se suspendió al terminar el primer tiempo por un piedrazo a uno de los jueces de línea. La gran fiesta del fútbol santarrosino quedó trunca gracias a unos inadaptados.

Nunca en la rica historia de enfrentamientos entre Gringos y Albicelestes se enfrentaron en una etapa tan decisiva en un torneo de Liga Rivadaviense. La fiesta preparada por ambas parcialidades se echó a perder por culpa de algunos inadaptados colados entre la hinchada visitante que arrojaron un proyectil que dio en la cabeza del asistente número dos, Mario Ruarte.


Esto echó por tierra la ilusión de un pueblo dividido por los colores de los dos clubes más históricos de Santa Rosa. El mismo pueblo que durante la semana se preparó para la gran fiesta del clásico con las hinchadas ayudando en lo que estuvo a su alcance para la puesta a punto de sus equipos. El mismo pueblo que desde la mañana del domingo se vistió de fútbol luciendo en las calles los colores de su corazón, el albiceleste o el azulgrana.

La fiesta se inició con una cancha de California repleta que vivió con intensidad en la previa la definición de la categoría Sub 23 y que contó con un gran recibimiento a los equipos de Primera de parte de las dos parcialidades. El juego dentro de la cancha estuvo a la altura de la fiesta. Con dominio parejo, las ventajas fueron escasas y cada equipo buscó su manera de alcanzar la ventaja en el marcador.


El juego fue cerrado y la alternativa más efectiva fueron los tiros a distancia y de pelota parada. Así ambos tuvieron chances claras como el golpe de cabeza de Luis Ceballos que dio en el travesaño y la chance inmejorable de Gastón Hirino al errar un penal en el otro arco.  No se pudo ver el desenlace del partido porque la fiesta que se estaba viviendo en las parcialidades en un duelo de cantos, se vio truncada.

Con el pitazo del final del primer tiempo, se terminó todo, porque una piedra dio en la cabeza del segundo juez de línea. El árbitro Albornoz suspendió el encuentro y se decidirá en la semana que sucede con la mitad del partido que quedó sin jugar. Ganaron los pocos violentos que rompieron la tela que hacía un pulmón en la tribuna visitante, en el sector donde tenía que trabajar Ruarte, y quedaron más cerca de lo debido para lograr su cometido. Otra vez la violencia le ganó al fútbol. Un “clásico” que ya no queremos ver.

SÍNTESIS:

California del Este (0): Julio Ortiz; Cristian García, Ignacio Cortez, Gabriel García, Juan Demateis; Sergio Alaniz, Fernando Gómez, Gastón Hirino, Lucas Luján; Alexis Demateis y Sebastián Salas. DT: Ariel Cortez.

La Dormida (0): Hernan Mélica; Walter Morenos, Aldo Arias, Gonzalo Quiroga, Gonzalo Ceballos; Samuel Menichetti, Guillermo Donaire, Luis Ceballos, Gonzalo Arias; Jesús Sarmiento y José Arrieta. DT: Mario Neira.

Goles: No hubo.
Cambios: No hubo.
Árbitro: Diego Albornoz. Asistentes: Rubén Camargo y Mario Ruarte.
Cancha: California del Este
Incidencias: Partido suspendido al término del PT por agresión a un juez de línea.
Resultados preliminares: Sub 23: California del Este 0-0 La Dormida (La Dormida ganó 4-1 por penales), arbitró Rubén Camargo / Sub 19: California del Este 0-1 Rodríguez Peña, arbitró Javier Velázquez

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